A las once fueron al salón de actos para la presentación, que
duró en torno a media hora; después la directora dijo qué alumno iba a cada
clase. Luego cada clase se fue con su tutor o tutora a su aula correspondiente.
Estuvieron hablando del curso, qué querían que cambiara, cómo conocer a los
nuevos… y así hasta las dos. Cuando fue la hora de irse a casa todos salieron
corriendo entusiasmados porque al día siguiente también salían a las dos.
Cuando se terminó la misa todos se fueron al patio y después a
sus clases para decorarlas y darles el horario.
Y este fue el inicio del curso 2015 de la Medalla Milagrosa.
Lucía Martín Carmona. Mini punto y aparte
No hay comentarios:
Publicar un comentario